Hysteria (2011) - Tanya Wexler

Hoy es un buen día en elproyectordeconciencias por varios motivos: la gente se sigue animando a mandar sus críticas para la sección Críticas de Invitados (así de originales somos poniendo nombres), además es la crítica de un preestreno, Hysteria, una película que estará llegando ahora mismo a vuestras carteleras, y, por último, porque el texto nos lo envía una mujer, y con esto rompemos la maldición que hasta ahora manteníamos y que convertía esta página en algo casi tan triste y asexual como una fiesta de ingeniería informática.

Pero vayamos a la crítica, Hysteria, de la casi nobel Tanya Wexler; y recuerda, si tú también quieres colaborar encontrarás todo lo necesario para este fin en la sección de contacto.

Hysteria - Por Chat Noir

Tuve el placer de ser invitada por la Productora Vértigo al preestreno de este film dirigido por una primeriza Tanya Wexler. Por norma general, me gusta leer la sinopsis de las películas que desde el título pueden causar curiosidad, fue el caso de esta, Hysteria, cuanto menos dudoso: terror, documental, suspense, comedia... pero NO, nada de esto.

Me sorprendió, en primer lugar, que estuviera basado en hechos reales y verídicos (parece ser, no soy experta en el tema). La historia trata de finales del siglo XIX, cuando un joven doctor, Joseph Mortimer Granville, interpretado por el británico Hugh Dancy, avanzado en su aprendizaje en la ciencia, es rechazado por su formación, tachándole como demasiado innovador y con ideas que se salen de lo conocido por la sociedad, como pudieron ser los gérmenes. Comienza a buscar trabajos siendo rechazado en hospitales, consultas, etc. hasta que da con un doctor (adinerado) especialista en tratar la histeria en las mujeres, una enfermedad muy extendida por Londres que trata de calmar diferentes síntomas (insomnio, espasmos musculares, irritabilidad...) a través de masajes en los genitales.

A partir de este momento se va desarrollando la trama y donde van metiendo historias paralelas con las hijas del doctor... aquí llega la parte romántica.

Lo mejor de la película es su crítica social feminista. La hija mayor del doctor, aun viniendo de buena familia, tiene unas ideas rompedoras y revolucionarias sobre la igualdad de la mujer, la lucha por tener los mismos derechos que los hombres y unas creencias tan profundas que eran suficientes hasta para romper los lazos con su familia. Por otro lado, un pensamiento socialista para ayudar a las clases más bajas de la sociedad hacían que te introdujeras en los problemas, sentimientos de los más desfavorecidos en la escala social de la época (actualmente muy de moda).

En definitiva, una comedia-romántica de sobremesa, previsible, con muchos toques de humor facilón, entretenida por el innovador tema (en relación con la época que trata), pero que no aporta nada, excepto la historia de los primeros vibradores. Cabe destacar, en los créditos, una serie de fotografías reales mostrando la evolución de los vibradores a lo largo de los últimos 130 años.

Votación sobre 10: 5.5 puntos